Trilogía del veraneo

Un Goldoni diferente

Tal vez algún espectador se sorprensa al encontrarse, en la Trilogía del veraneo, con un Goldoni distinto. En los dos primeros actos se reconoce a quien, a partir de la "Commedia dell´Arte", creó la comedia moderna, donde se percibe, envuelta en una comicidad nunca desenfrenada, la sutil visión irónica de la condición humana, más allá de los límites precisos de una sociedad: la de Venecia en el siglo XVIII.

La última jornada de la Trilogía, en cambio (tres obras escritas a lo largo de varios años, en circunstancias diversas que fueron modificando el talante, la óptica y los medios expresivos del autor), propone una atmósfera crepuscular, un desencanto y una resignación que la mayoría de los erudítos y los crítocps entienden como el pórtico por el cual, un siglo después Chéjov entraría en la historia del teatro occidental.